Los inversores institucionales, es decir, gestoras de fondos de inversión y de planes de pensiones, bancos y compañías de seguros, dominan el panorama del accionariado de las empresas cotizadas en el mundo. Un 41% de la propiedad de la capitalización bursátil está en sus manos, frente a otro tipo de propietarios que controlan una parte de la tarta mucho menor: el sector público, por ejemplo, tiene un 14%; las empresas privadas y los accionistas individuales suman el 18%. Un informe de la OCDE ha analizado qué manos mecen la cuna de la propiedad empresarial y las diferencias que existen entre países y regiones.